jueves, 22 de noviembre de 2007

Sidney Gottlieb y la doble moral antidrogas (antaño nomas jajaja) de los E.U.A



Cuando Churchill hablaba de un mundo "en un siniestro cono de sombras debido a la perversión de la ciencia", aludía a los repugnantes experimentos en seres humanos efectuados por médicos nazis en los campos de concentración.

Sin embargo, sus comentarios podrían haberse aplicado, a las actividades de Sidney Gottlieb, el científico de la CIA que durante veinte años (desde los 50 hasta los 70) administró LSD (ácido lisergico, popularsisimo entre la juventud hippie de los 60´s) y otras drogas de control mental a innumerables sujetos -sin su conocimiento- en busca de una fórmula para ganar la Guerra Fría sin recurrir a las armas. (drogarlos y dominarles)

Sidney Gottlieb fue un químico y psiquiatra militar americano probablemente conocido por su participación en el programa MKULTRA de control mental (mediante químicos) de la Agencia Central de Inteligencia (o la CIA para los fans de películas de acción )

Sus cobayos o conejillos de Indias fueron enfermos mentales, presos, drogadictos, prostitutas y sus clientes y hasta empleados de la CIA. Por lo menos uno de esos "participantes" forzosos murió. Otros enloquecieron o sufrieron daños psicológicos irreversibles. En verdad, sólo hubo una diferencia de magnitud entre las actividades de Gottlieb y sus compinches y las que enviaron a la horca a los científicos nazis condenados en Nuremberg, en 1946.

Sidney nació en el Bronx con el nombre Joseph Schneider. Obtuvo un doctorado en química por el Instituto Tecnológico de California. Aun siendo tartamudo de nacimiento, Gottlieb se sacó un doctorado en logopedia, es decir estudio los mismos transtornos que padecio, problemas del lenguaje, la voz y la deglución. Tenía, además, un pie zambo, pero eso no fue impedimento para que practicara el baile popular, que fue una pasión continua en su vida. En 1951, Sidney Gottlieb se incorporó a la Agencia Central de Inteligencia.

Como experto en venenos, dirigió la división química del Grupo de Servicios Técnicos (Technical Services Staff, TSS). Sidney terminó siendo conocido como el "Brujo negro" y el "Sucio Embustero". Supervisó preparaciones de venenos mortales y experimentos de control mental.
Tal vez de su figura se extraiga la inspiración para haber creado al personaje "espantapájaros" de "Batman"

En abril de 1953 Sidney Gottlieb dirigió el proyecto secreto MKULTRA, que puso en marcha el director de la CIA Allen Dulles. Gottlieb era conocido por administrar LSD y otras drogas psicoactivas a individuos inconscientes y por financiar investigaciones psiquiátricas y desarrollar "técnicas que reventarían la psyche humana hasta el punto de confesar cualquier cosa" de aqui salio el suero de la verdad, un químico mas para matar la voluntad humana y al hombre pues también en dosis altas es la inyección letal ( el original , el tiopentato de sodio se descubrió en los 30´s pero este señor lo hizo superior al mezclarle un cóctel de barbitúricos)

Sufragó a físicos como Ewan Cameron y Harris Isbell en unas investigaciones psiquiátricas que utilizaban a individuos inconscientes como conejillos de india. Muchas personas sufrieron graves efectos secundarios como consecuencia de los estudios financiados por Gottlieb y por la Fundación Rockefeller.

En marzo de 1960, con el Proyecto cubano, un plan de la CIA aprobado por el presidente Eisenhower y bajo dirección del Director para planes de la CIA, Richard Bisell, Gottlieb concibió la idea de pulverizar el estudio de televisión de Fidel Castro con LSD y espolvorear los zapatos de Castro con talio( un elemento cancerígeno) con objeto de hacerle caer el pelo de su barba. Gottlieb también esbozó planes para asesinar a Castro, entre los cuales estaba el uso de un puro envenenado, un chubasquero con veneno, una caracola explosiva y una pluma de escritura venenosa (ataques al comunismo en plena guerra fría)

Bueno es que haya tantas instituciones altruistas y llenas de buena voluntad para con sus semejantes, yo no se por que los odian tanto si son tan buenitos.

También intentó contaminar el pañuelo del general iraquí Abdul Karim Qasim con toxina botulínica. Menos conocida fue una operación llevada a cabo por el Programa Phoenix de la CIA en Vietnam, donde un equipo de psicólogos de la CIA efectuaron experimentos de control mental con sospechosos del NLF que estaban detenidos en la cárcel de Bien Hoa a las afueras de Saigón.

Una cita de este señor que suena a argumento de película de acción pero fue muy real... demasiado.

"I was attempting to put on, with a good cover story....to test to see what would happen in subways, for example, when a cloud was laid down on a city. It was denied on reasons that always seemed a little absurd to me."

Ocultisimo y poco conocido tema me parece.

Si les interesa algo mas de la historia secreta de la CIA Y el MKULTRA busquen datos en la red, hay suficiente en google y si prefieren hay muchos textos especializados.

Control de procesos. Asombrosamente simple.


Me parecio asombroso lo sencillo de esta imagen y lo "intrincado" (notese el paréntesis) de la mente de hombre.

Les traduzco malamente.

"En Amsterdam el piso de azulejo en los orinales de Schiphols podría pasar la inspección de un cuarto de operaciones ( o cirugía)
Pero nadie se da cuenta. Lo que todos ven es que hay una mosca en cada orinal.

Si miras mas de cerca veras que la mosca esta en alto relieve en la porcelana. Sirve para mejorar la punteria, si un hombre ve la mosca es muy probable que le apunte a ella, reduciendo el riesgo de derrames en un 80% pues le da algo en que pensar. Es un ejemplo perfecto de control de procesos.

Lo que me pareció jocoso es que al preguntar a algunos conocidos vía MSN respondieron que SI suelen apuntar a alguna cosa que flote, este pegada o se note mas en un inodoro.

Asombroso como un detalle tan simple puede influir en el comportamiento de las personas aun sin estar plenamente conscientes de ello.

miércoles, 21 de noviembre de 2007

Presumo mi nuevo libro: La rebelion de los colgados

Hace un par de días fue la "feria del libro" a nivel local, fui , vi y adquirí un libro que ya hacia algunos ayeres había leído( en mi época de secundaria) y lo compre, se trata de "La rebelión de los colgados" del enigmatico B. Traven A.K.A Torsvan Croves

No encontré el ebbok para dejárselos pero les pongo unos fragmentos muy interesantes de una novela histórica ( a medias) en la que encontraran deliciosos aderezos de corte comunista.

Los indios no ignoraban que la vida en la finca les sería menos dura; pero preferían quedarse en su tierra árida, seca (...), y vivir su vida precaria, con la agonía constante de ver destruidas sus cosechas, a perder la libertad, aun cuando a cambio de su servidumbre se les hubiera ofrecido el Edén. Preferían morir de hambre libres, independientes, a engordar bajo las órdenes de un amo. Si se les hubiese preguntado el porqué de su elección, habrían contestado lo mismo que la vieja negra de Luisiana, esclava en su juventud, antes de la guerra de secesión. Entonces eran sus amos quienes debían de preocuparse por su existencia; ella comía tanto como quería. Ahora vivía en una choza miserable y lavaba la ropa de sus vecinos para poder vivir, sin saber jamás si podría comer al día siguiente, si se vería obligada a robar para vivir y si la meterían en la cárcel. Un día en que le preguntaron: "Pero vamos a ver, vieja, ¿es que no vivías mejor cuando eras esclava?", contestó: "Sí, antes vivía mejor; pero ahora soy feliz, porque no es el estómago lo único que hace feliz al hombre."



No debía culparse a los rebeldes por sus ideas de muerte y destrucción. Jamás se les había dado libertad de expresión y toda posibilidad de comunicación y de consulta les había sido negada. Nunca nadie se había aproximado a ellos para hablarles de economía o de política. No había periódico que se atreviera a criticar los actos del dictador, ni a los trabajadores llegaba nunca libro alguno que pudiera darles una idea de cómo mejorar su situación sin recurrir a la destrucción y a la matanza.

Los que no pertenecían al grupo del dictador debían escuchar y callar. Los obreros, los campesinos, las gentes humildes se hallaban privadas de todo derecho y tenían un solo deber: obedecer. La obediencia ciega les era inculcada a fuerza de fuetazos y llegaba a formárseles una segunda naturaleza. En dondequiera que los derechos se encuentren sólo en manos de unos cuantos y las obligaciones pesen sobre la masa a la que no le sea dado ni levantar la voz para criticar, acabará por reinar el caos inevitablemente.

No era sólo el dictador el que decretaba. Los grandes industriales, los banqueros, los señores feudales, los terratenientes tenían determinados deberes para asegurar la dominación del dictador. Pero esos grandes personajes tenían algunas veces algo que decretar y no lo hacían por sí mismos, sino que obligaban al Caudillo, al dictador, a decretar lo que les venía en gana. De esa manera podían encadenar al pueblo apoyando sus actos en las leyes. De haber decidido por sí mismos, el pueblo se habría enterado de que la única función del Caudillo era llenar los bolsillos de los poderosos, en tanto que dictando al dictador lo que debía decretar, los derechos de éste se decían expedidos en interés del Estado, y era así como muchos patriotas cándidos y sinceros eran engañados.

Si los muchachos hubieran propuesto a los patronos discutir sus diferencias pacíficamente, éstos les habrían dado su respuesta envuelta en plomo, pues el solo hecho de que un asalariado propusiera el examen y la discusión de su situación era considerado ya como un crimen contra el Estado. Y un crimen también era el de permitir a los trabajadores hacer cualquier proposición. El único derecho de los trabajadores era el de trabajar duro y obedecer. Eso era todo. Lo demás era cosa del dictador y de su camarilla, a quienes pertenecía por entero el derecho a mandar y de criticar.

Así pues, no era salvajismo el que impulsaba a los indios al asesinato y al pillaje. Sus hechos no podían ser tomados como hechos de crueldad porque sus adversarios, sus opresores, eran cien veces más salvajes y más crueles cuando de salvaguardar sus intereses se trataba.





- ¿Qué hay? -preguntó el General-. ¿Ya se han decidido a venir con nosotros?
- No, camarada, ya no es necesario; ahora tenemos lo que queremos. Ahora tenemos tierra y libertad. El rancho es nuestro.
- ¿Se lo regaló el mayordomo?
- No..., bueno, es decir..., cuando le explicamos a Don Chucho que desde hacía muchos años nosotros cultivábamos el ranchito se puso furioso y comenzó a gritar que él sabía bien lo que ocurría, que los malditos piojosos
de las monterías nos habían excitado, azuzado, mal aconsejado y que si no cerrábamos el hocico inmediatamente, ya se encargaría él de arreglarnos en cuanto los bandidos de las monterías levantaran el campo.
- Y ustedes, ¿qué contestaron?
- ¡Casi nada! Desde la víspera habíamos afilado los machetes. Cuando nos acercamos a don Chucho él sacó la pistola y disparó. Dejó tendido a Calixto y a Simón e hirió a tres más.
- ¿Entonces es por miedo por lo que han corrido hasta aquí?
- No, amigo. Pensamos bien lo que tú nos dijiste y a estas horas don Chucho, su mujer y sus chamacos son difuntos. Además, cogimos su pistola y su fusil porque pueden hacernos falta. En cuanto a su casa, no la queremos está llena de ratas. En estas condiciones camarada jefecito, te darás cuenta de que no tenemos necesidad de partir con ustedes, ya que lo que ahora tenemos es todo cuanto deseamos, nada más. Si se quieren quedar aquí en el rancho pueden hacerlo porque ya no hay ni capataces ni patronos.
- No, amigos, gracias. Nosotros nos vamos y ustedes se quedarán para repartirse la tierra y trabajarla tranquilamente. Pero dígame: si los rurales llegaran ahora mismo y les preguntaran por el mayordomo, ¿qué responderían ustedes?
- Les diríamos que don Chucho y doña Amalia habían corrido asustados a refugiarse en la selva, y si nuestra afirmación no resultara de su gusto, volveríamos inmediatamente a afilar los machetes y podríamos hacer uso además de la pistola y el fusil que ahora tenemos; pero tú sabes, jefecito, que los rurales no llegarán hasta acá porque ustedes acabarán con ellos y con los federales en el camino. Ahora regresaremos, porque los muchachos han matado un cerdo muy grande que doña Amalia había engordado y a estas horas ya deben estar listos los chicharrones. Lástima que no podamos convidarlos, son ustedes tantos que no alcanzaría. Adiós, amigo capitán; adiós todos y muchas gracias. ¡Que la suerte los acompañe! El Profesor llamó a Andrés y le dijo:
- ¿Te has dado cuenta, Andresillo? Es a esto a lo que llaman revolución práctica.
- ¿Qué quieres decir con eso?
- Pues, sencillamente, que el instinto de posesión, que la idea de propiedad, se hallan ahora más hondamente arraigados en estos ranchos que antes. Sólo el nombre del propietario ha cambiado, y te aseguro, hermano, que mañana o pasado mañana los nuevos dueños se darán de machetazos a causa de la propiedad y se matarán unos a otros hasta que sólo quede uno, si es que se puede, para gozar de la propiedad. El que quede será el que se haya hecho con la pistola. Ese será el nuevo dueño, y si alguno otro logra quedarse con la escopeta, ése será el mayordomo. En cuanto a los que por azar solo conserven la vida, serán los nuevos peones.
- Entonces, ¿la revolución habrá sido inútil?
- Para estas gentes, sí. La cosa les ha sido muy fácil y la han logrado prontamente. Las facilidades y la rapidez no son buenas para los revolucionarios. Los campos y los cerdos habrán cambiado de manos, pero las ideas serán las mismas sobre las que se apoya todo el sistema, que desgraciadamente ha quedado intacto. Ayer el amo se llamaba don Chucho, mañana se llamará Florencio y después Eusebio o Fulano; pero los amos continuarán en sus puestos, porque aquí todo sigue igual. Ellos no tuvieron ni una sombra de reconocimiento para nosotros, que les dimos la idea. Ellos te dejarán reventar de hambre y a mí también, antes que dejarse privar de un pedazo de chicharrón.
Andrés intenta defender a los peones diciendo:
- ¿Pero cómo querías que supieran lo que debían hacer si nadie se lo explicaba?
- Los revolucionarios que necesitan les expliquen los motivos por los que han de rebelarse son todo menos revolucionarios. La verdadera revolución, la que es capaz de cambiar los sistemas, se encuentra en el corazón de los verdaderos revolucionarios. El revolucionario sincero nunca piensa en el beneficio personal que la rebelión le reportará. Él sólo quiere derribar el sistema social bajo el que sufre y ve sufrir a los demás. Y por destruirlo y ver realizadas las ideas que considera justas se sacrifica y muere.


¿Que tal?
¿les gustaron?
Es una gran novela de hace menos de 100 años, no tiene desperdicio, el sr. B. Traven es un escritor de esos que no vienen al mundo seguido, tiene un gran toque humanista y ademas es un gran observador, a un etnologo sin duda le agradara.

Educativo e interesante juego del reto del viajero

Este juego es muy sencillo, se trata de que lo mas rápido posible des click en el lugar que te marca, se te darán bonificaciones por velocidad y cercanía en kilómetros al sitio pedido. Es adictivo si te gusta la geografía. ( y si no, nada pierdes probando.


El kamasutra. No es lo que uds piensan de primera mano.

Muchas veces, en las reuniones casuales se habla del kamasutra como un mero compendio de poses sexuales pero...¿de donde salio? ¿solo es fornicio? A continuación veremos un poco mas de ello.

Primeramente fue escrito por el religioso Vatsyayana (que aparentemente murió virgen) y en el veía la unión carnal como una forma de acercarse al cielo, no lo veía como un pecado (aprendan los de otras religiones) o como algo nocivo, con excepción de los casos en que fuera practicado de manera frívola.

El Kama Sutra se compone de 36 capítulos que tratan sobre 7 temas diferentes:

  1. "Introducción" (4 capítulos): sobre el sexo en general, su lugar en la vida de un hombre, y una clasificación de las mujeres. (habla de tamaños medidas y formas)
  2. "Sobre el acto sexual": una discusión en profundidad sobre los besos, varios tipos de juegos sexuales preliminares al acto sexual, orgasmos, una lista de posiciones sexuales, sexo oral, tabúes y ménage à trois,(el trío pues) como pueden ver no hay nada nuevo bajo el sol y este Vatsyayana era muy liberal y sin tanta cerrazón a las cosas novedosas ( todo sea por ganar el cielo)
  3. "Sobre la elección de una esposa" (5 capítulos): cortejo y matrimonio.
  4. "Sobre la esposa" (2 capítulos): conducta adecuada de una esposa. ( noten el sexismo)
  5. "Sobre las esposas de otros" (6 capítulos): principalmente seducción.
  6. "Sobre las cortesanas" (6 capítulos). (las prostitutas pues para que se entienda)
  7. "Sobre atraer a otras personas" (2 capítulos).

Vatsyayana creía que había 8 maneras básicas de hacer el amor, y 8 posiciones principales. El Kama Sutra tiene un total de 64 "artes", nombre que da el autor a la combinación de una manera de hacer el amor con una posición. El capítulo que enumera las múltiples artes es el más conocido, y es un error muy común confundir éste con el Kamasutra cuando en realidad es sólo una parte de él. Cabe mencionar que el hacer el amor es el arte de jugar el uno con el otro.

El Kamasutra ha ayudado a muchas personas a disfrutar del arte del sexo a un nivel más profundo y puede considerarse como una guía técnica para el disfrute sexual, así como un esbozo de las prácticas sexuales en la India durante esa época.

A lo largo de la historia, el Kama Sutra adquirió una mala reputación que terminó por obscurecer su valor como obra literaria, al ser interpretado apenas como una lista de posiciones sexuales (al menos los lectores del blog saldrán de esta idea) y usado como pretexto para vender diversos libros con lista de posiciones, o hasta mera pornografía. En verdad, el libro es un importante documento sobre la historia de la sexualidad humana, instruyendo a amantes en el arte de la seducción, en cómo cortejar, cómo conducir una discusión con su pareja, diversas técnicas sobre besos, juegos y caricias, entre otros tópicos.

Ahí esta... gratis su libro... Nunca esta de mas un texto que no conocemos.

Libertad

Somos entidades libres decimos.... Hacemos lo que queremos expresamos... Soy un libre pensador nos jactamos... ¿No estamos supeditado...